Saltear al contenido principal

Fumigar para asegurar el control de plagas para empresas: guía práctica

Fumigar Para Asegurar El Control De Plagas Para Empresas: Guía Práctica

El control de plagas para empresas es uno de los servicios más demandados cuando observamos que hay hormigas o termitas en un lugar. Para gestionar las plagas en Mataró, es recomendable tener en cuenta previamente qué es una fumigación, qué medidas de seguridad tener en cuenta y cómo saber si la fumigación ha sido efectiva.

En qué consiste una fumigación

Fumigar es una técnica que permite controlar plagas de animales por medio del uso de determinadas sustancias químicas que resultan tóxicas para ellos. Al añadir estos compuestos gaseosos en el ambiente, se consigue que permanezcan en él el tiempo suficiente para acabar finalmente con las plagas. Estos compuestos también pueden ser humos (partículas sólidas que se dispersan fácilmente en el aire) o bien aerosoles (las partículas que se dispersan son líquidas).

Medidas de seguridad en el control de plagas para empresas

En primer lugar, cabe destacar que los productos que se utilizan habitualmente no son tóxicos para los humanos, aunque sí lo sean para los animales que van a fumigarse. No obstante, es cierto que en algunas ocasiones estos productos tienen olores que resultan desagradables y pueden irritar las vías respiratorias. En estos casos, es conveniente abandonar el lugar y ventilar antes de volver a pasar tiempo en este espacio.

Esto último tenemos que tenerlo en cuenta siempre para las bombas para insectos, que al estar formadas por propulsores tipo nebulizador pueden provocar incendios o explosiones. Esto implica que es fundamental seguir las indicaciones exactas que diga cada una de las bombas.

Cuándo fumigar

En primer lugar, hay que destacar que no existe una época del año idónea para la fumigación, pues lo mejor sería realizarlo cuando se vean las primeras plagas. Por eso, cualquier estación del año sería apta para realizar este proceso. Eso sí, es importante tener en cuenta que, en épocas de lluvia, es mejor esperar para las fumigaciones externas, pues la eficiencia no es la misma que en seco.

Por otro lado, la fumigación puede emplearse a tres niveles diferentes: desratización, desinsectación y desinfección. En el primero de los casos, se pretende eliminar ratas y ratones, pues son algunos de los vectores más frecuentes que pueden transmitir enfermedades. En el caso de los insectos, algunos pueden ser vectores, pero otros simplemente resultan molestos; por eso es interesante plantearse acabar con las hormigas en la oficina. Por último, la desinfección de espacios eliminando virus o bacterias es una forma de salubridad que prevendrá la aparición de determinadas enfermedades.

Cómo saber si el control de plagas para empresas ha sido efectivo

Comprobar qué ha sucedido tras la fumigación dará idea de si esta ha sido o no efectiva. Se trata simplemente de comprobar que los organismos no aparezcan nuevamente. Además, hay que tener en cuenta si la fumigación se ha realizado también para huevos que pueden haber resistido a los químicos. En cualquier caso, habrá que revisar periódicamente la zona tras la fumigación para asegurarse de los organismos que hayan desaparecido definitivamente.

En resumen, el control de plagas para empresas es fundamental cuando hay, por ejemplo, problemas con termitas. Lo más efectivo es recurrir a la fumigación, una técnica que acabará con todas ellas. En Iluro Plagas ofrecemos estos servicios para conseguir un ambiente más adecuado para el trabajo.

Así que si has detectado una posible plaga en tu lugar de trabajo, no lo dudes más. ¡Llámanos!

Volver arriba